let me take you down, cause im going to strawberry fields.
nothing is real and nothing to get hungabout. Strawberry fields forever.
nothing is real and nothing to get hungabout. Strawberry fields forever.
Una leyenda dice que si partes una fresa doble a la
mitad y la compartes con una persona del sexo opuesto, ambas se enamorarán el
uno del otro.
Hace tiempo conocí a una persona, pero no una cualquiera.
Una especial. De este tipo de personas que piensas que nunca vas a tener nada con
ella en común o ningún tema de lo que hablar simplemente por su aspecto físico,
pero que luego al conocerla, te sorprende lo tantísimo que podéis pareceros.
Compartíamos muchísimas cosas en común, y puede que eso sea
sencillo, pero teníamos una conexión extraña, y digo extraña porque lo que más
nos unía era especialmente nuestra afición y peculiar encanto por las fresas. Podíamos
hablar horas y horas sobre ellas; Sobre su forma, tacto y apariencia, recetas,
sobre historias, mitos y curiosidades...
En una de estas conversaciones que tuvimos me contó algo curioso sobre las fresas o mejor dicho, sobre los campos de fresas, y que significaba ello para John Lennon.
Puede
que todos sepáis, que "strawberry fields forever" era una canción del
repertorio de The Beatles.
Pero no era solo una mera canción. Esta canción tiene un trasfondo muy
singular: En este tema escrito por Lennon, los campos de
fresa representan lo irreal, lo fantástico, lo hermoso. En esa época de
plenitud hippie, lo fantástico, hermoso, irreal y psicodélico era considerado
eterno. Se solía enlazar la idea de lo psicodélico con la "eternidad"
de esa experiencia (experiencia que sólo se conseguía con ciertos
estupefacientes, aquí entra el tema de "LSD").
Videoclip "strawberry fields forever" Según explicó Lennon, la canción fue un «psicoanálisis hecho música»
Así, los campos de fresas son eternos porque no
tienen que ver con la realidad común y aburrida de todos los días, sino con una
experiencia fantástica, irreal, maravillosa, que de alguna forma de la
impresión de que dura para siempre. Es, en resumidas cuentas, una metáfora
entre las fresas y la famosa droga ochentera, el LSD.
Y como de fresas va la cosa, aquí os traigo "atardecer de fresa y limón" una rica bebida, que tal y como dice su nombre, básicamente se compone de esta fruta:
" Nada es real,
no hay nada por lo que preocuparse.
Campos de fresa para siempre"
Strawberry fields forever
John Lennon
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